Criocirugía.

Consiste en el tratamiento y destrucción de lesiones benignas o malignas de la piel mediante la congelación de éstos con nitrógeno líquido. 

La congelación y descongelación de las lesiones provocan daño de las células y la destrucción de las lesiones. El procedimiento suele realizarse mediante anestesia local y es ambulatorio. 

La recuperación puede variar de 2 a 8 semanas, dependiendo de la lesión tratada. 

Después del procedimiento pueden aparecer en sitio tratado ampollas, inflamación, secreción y costras. Mediante esta técnica pueden ser tratadas: queratosis seborreicas, queratosis actínicas y algunos tipos de carcinomas basocelulares.